BAR MONASTERIO DE PAMPLONA

El "Monas", huevo, bacalao y más.

Cartel que da acceso al bar.

Ayer 1 de Diciembre entre el Gaucho, el Niza, cerquita del Baserriberri, pared con pared con el Gaucho y a tiro de piedra de la cocina de Alex Mugica; tras una profunda reforma se reabría el "monas". El bar monasterio de toda la vida. Ese lugar donde en cazuelica de barro se untaba abundante pan en un mítico bacalao con tomate. En donde se iba con las entradas de los toros y se pagaba el pacharán. En donde la historia se ha respetado con humildad y, donde "poco a poco" se quiere crecer, donde se pretende ser el"monas"; con Aaron Ortiz en los mandos de la cocina.

La pregunta es ¿otro más o alguien más?. Me gustaría decir que alguien más, los pinchos así lo cuentan. Es primer día, los desajustes son normales pero, la esencia, el sabor y las formas obligan a otra visita; a sabiendas que vas a disfrutar. Pero si te parece vamos a los pinchos.

Bacalao con tomate, en su punto, ni pasado, ni crudo. Con su lascas, jugoso y con un buen tomate de fondo. Nada más. Tal cual. Quizás un punto tibio que personalmente agradezco pero, el gran público querrá más caliente. Complicado ya que la melosidad esta en juego dependiendo de "como de caliente" guste al otro lado de la barra.

Bacalao con tomate.
Bar Monasterio de Pamplona

Sardina ahumada, concasse de tomate, cebollino y tosta de pan. Muy rico. Faltaba un pelo de jugosidad en el pan, pero es ser muy puntilloso. Totalmente recomendable.

Sardina ahumada, concasse de tomate y ali-oli.
Bar Monasterio de Pamplona

Tortilla de patata. La tome en la cocina, en su punto. Alguno le gustará más melosa, más babosa; para mi ese punto seco/jugoso es el correcto a sabiendas que me busco un problema entre los catedráticos de la tortilla de patata.

Tortilla de patata.
Bar Monasterio de Pamplona

Puntillas, cebolla confitada, ali-oli y otra vez cebollino. Es lo que tienen las inauguraciones. Buen producto, puntillas muy ricas como si estuvieses en Sanlucar, detalle el de la cebolla confitada y ali-oli ni fuerte ni graso, en su sitio.

Puntillas con cebolla confitada.
Bar Monasterio de Pamplona

Boqueron, brotes de cebolla...frescor y punto graso. Rico.

Boquerón brotes de cebolla.
Bar Monasterio de Pamplona

Memorables los mejillones picantes sobre chips de morcilla. Me recomendaron apartar los brotes y dejarlos para el final. Jugoso, picante y graso. Los restos de tomate picante y brotes,  pedían un buen verdejo. De repetir.

Mejillones picantes sobre chips de morcilla.
Bar Monasterio de Pamplona

Hamburguesa de foie, pimiento confitado y parmesano. Suavidad y fondo de foie, diferente. Menos queso y más acidez hará que sea memorable, Seguro.

Hamburguesa de foie, pimiento confitado y parmesano.

Bar Monasterio de Pamplona

Desajustes normales en una apertura, nervios, ilusión y ganas de que el "monas" vuelva al circuito. Queda redondear pinchos y cambiar algunos conceptos. No pierdas la pista del monas, después de unos meses has de poder decir "yo estuve antes de ese momento en el que hay que sacar los codos en la barra para poder pedir". Seguro.

Escrito por EL PEROLAS

Me gusta comer bien, beber mejor, disfrutar de una buena conversación sobre gastronomía, cocinar y, gozar del trabajo de un sinfín de profesionales que con su esfuerzo, ilusión, empeño, sinceridad y saber hacer crean el segundo de los mejores placeres que podemos disfrutar. Intento, con la ayuda de muchos, contar "tal cual" sin trampatojos, acritud ni prejuicios, el OFICIO de todas esas PERSONAS.Espero hacer muchos amigos por el camino, que comience el espectáculo.